¿Que hay de nuevo en mi vida desde el año pasado? Una cosa que me llena de alegría: y es que puedo compartir la comida de mediodía con otras personas del barrio y alrededores, y así no como sola. Es en un centro social del ayuntamiento, de lunes a viernes. María, una chica de Ecuador, nos sirve, ayudada por otra chica española. La comida llega por catering y somos unos 40 (en la mayoría hombres) en aprovecharnos. Todos hemos pasado previamente por los Servicios Sociales que acogen a quienes tienen economía precaria o pasan necesidad. Cada uno paga en proporción a la pensión o a la ayuda que recibe.

Deciros también mi alegría de haber podido participar a dos reuniones- encuentros de hermanitas de Europa, en Paris y Roma. Convivir juntas después de tantos años sin vernos y compartir experiencias nos llena de gozo. Una hermanita decía que si la Fraternidad no existiera se tendría que inventar…Venía muy contenta del Capítulo General, terminado recientemente

Sigo intentando abrirme a la Vida y a lo que ella trae consigo, pensando en todos vosotros, cada uno en su propia situación. Dios nos quiere tanto…¡a todos!