Viaje de Aurelio Sanz a Burkina Faso

Aurelio, miembro de la Fraternidad Sacerdotal, del Grupo de Difusión y del Equipo de Redacción del Boletín Iesus Caritas, nos escribe desde Burkina Fasso, donde la Fraternidad Sacerdotal apoya un proyecto de desarrollo:

Jean, no sabe su edad, me ofreció la semana pasada su plato de comida (mijo) al salir de la escuela (¿escuela?) en Pissila, Burkina Faso. Estaba a 200 metros y vino corriendo a ofrecerme gratuitamente lo que tenía. Nunca he probado un mijo más rico, sin que le diera asco que metiera mis dedos en su plato, sin conocerme de nada. Yo iba a visitar unas ancianas que viven en casitas de adobe de la parroquia y que expulsan de sus aldeas al quedar viudas o no tener familia, y que se ganan la vida hilando algodón. Pensé en la canción "Cuando el pobre nada tiene y aún reparte..." Pensé en las soluciones globales al hambre y la pobreza, en los parches que ponemos...

Me dio una gran lección sin pretenderlo.

Un abrazo.

Aurelio